header-blog2-crowfunding.png

5 cosas que no sabías de la ley de crowdfunding

14 ago. 2015 por Guillermo Escribano

Era una herramienta necesaria. La ley de fomento de financiación empresarial, conocida como ley de crowdfunding , es el respaldo jurídico a la financiación colectiva de empresas, donde se incluye el crowdlending. Como toda ley, tiene letra pequeña. Te descubrimos sus secretos.

Pero, ¿qué es la financiación colectiva? Una revolucionaria forma de conseguir financiación alternativa para personas o empresas más allá de las asfixiantes condiciones impuestas por la banca tradicional. De hecho, el 45% de las pymes consideran el acceso al crédito como su mayor preocupación, según el Banco Central Europeo.

La financiación colectiva engloba a toda inteligente cooperación emprendida por personas que establecen una red para conseguir dinero u otros recursos y sienta sus bases en la tecnología e Internet. Es más rápida, eficiente y atractiva que la antigua financiación a través de los bancos. La ley de crowdfunding pretende protegerla.

1. ¿A qué tipos de crowdfunding afecta la ley?

En líneas generales podemos hablar de tres tipos de financiación colectiva: crowdfunding, equity crowdfunding y crowdlending o financiación para pymes. La ley no afecta a la primera de ellas, pero para no perdernos con la terminología, explicaremos cada una:

  1. Crowdfunding: el micromecenazgo de recompensas más popular y que no está afectado por la ley. Un autor o artista quiere lanzar una obra y se financia a través de un colectivo al que después recompensa en función de la aportación recibida.
  2. Equity crowdfunding: también conocida como financiación colectiva de acciones. Una empresa que requiere financiación acude a inversores privados que, a cambio de una aportación de capital, reciben una participación accionarial proporcional.
  3. Crowdlending: también llamado préstamos P2P. Una empresa que necesita financiación acude a una plataforma online como Funding Circle, donde encuentra inversores privados dispuestos a prestar dinero a cambio de un tipo de interés.

2. ¿Qué tipo de inversores establece la ley?

Los inversores privados que quieran obtener rentabilidades atractivas a través de crowdlending no deben preocuparse por los riesgos. Están protegidos por la ley de financiación empresarial y por los protocolos internos de plataformas como Funding Circle, que se aseguran de que las empresas que participan en sus páginas web ofrecen una seguridad en el retorno de la inversión.

En cualquier caso, la ley establece dos tipos de inversores en función del límite de inversión.

Inversores acreditados:

  1. Inversores institucionales, empresas o fondos con activos de 1 millón de euros.
  2. Empresas o fondos con negocio por valor de 2 millones o unos recursos propios de 300.000 euros.
  3. Personas físicas con unas rentas anuales superiores a 50.000 euros o un patrimonio de más de 100.000 euros.

Inversores no acreditados: cualquiera que esté fuera de las anteriores consideraciones.

3. ¿Cuánto dinero puede invertir cada uno?

La ley de crowdfunding pretende proteger a los pequeños ahorradores que esperan sacar el máximo partido a las inversiones alternativas en opciones como el crowdlending, donde pueden alcanzar increíbles rentabilidades del 21% como en Funding Circle. Por eso, cada tipo de inversor tiene unas posibilidades distintas:

  • Inversores acreditados: sin límite de inversión.
  • Inversores no acreditados: no podrán depositar más de 3.000 euros por empresa, ni más de 10.000 euros por año y en todas las plataformas.

4. ¿Cuánto dinero pueden conseguir las empresas?

Pese a los beneficios que las formas de financiación alternativa han aportado a la economía española, la ley ha impuesto límites para conseguir préstamos para empresas más allá de la banca.

Las pymes que quieran préstamos de crowdlending podrán recaudar hasta 5 millones de euros anuales mediante inversores acreditados. En cambio, el tope será de 2 millones si se trata de inversores no acreditados. Además, ningún proyecto podrá superar el 125% de la cantidad solicitada si los inversores deciden apostar más de lo previsto, como ocurre en algunos casos de equity crowdfunding. Ninguna empresa podrá tener más de un proyecto en cada plataforma.

5. ¿Están reguladas las plataformas de financiación colectiva?

Por supuesto. Como son intermediarias financieras entre los inversores y las compañías, las plataformas de equity crowdfunding están reguladas por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que además vigila su comportamiento. Es obligatoria el alta de todas las plataformas desde finales de octubre de 2015 conforme a la ley de crowdfunding.

Por otro lado, las plataformas de crowdlending, como son entidades de crédito, están sometidas al control y la regulación del Banco de España. Cuando un inversor privado quiera comprobar el historial de solvencia de un proyecto antes de prestar su dinero, el Banco de España regulará los formularios. Una forma segura de obtener créditos para empresas .

Además, las plataformas tienen que firmar un seguro de responsabilidad social con una cobertura mínima de 300.000 euros por reclamación de daños y un total de 400.000 euros al año para atender todas las posibles reclamaciones que puedan surgir.

En resumen, la nueva ley de fomento de financiación empresarial es una magnífica herramienta que regula un sector joven y prometedor que ha venido para quedarse. El crowdlending ofrece una financiación alternativa a la banca necesaria para beneficiar a la economía española y permitir que las pymes españolas puedan crecer y crear empleo.

Invierte ahora

Artículos que pertenecen a Pymes